Hay frases de danza que bien podrían servirnos cada lunes. Citas inspiradoras para bailarines y que a los simples mortales nos invitan a superarnos y a esforzarnos incluso antes del primer café. Y es que no hace falta formar parte de un ballet internacional para tener el espíritu de un auténtico bailarín.
Isadora Duncan, bailar es vivir
Duncan vivió el renacimiento de las artes tras la Primera Guerra Mundial, y su influencia fue definitoria no sólo para la danza, sino también para la pintura, la música, la fotografía e incluso la moda. Isadora Duncan creía que la danza debía representar la vida; y por eso sus espectáculos presentaban verdaderos sentimientos en escena.
George Balanchine, el salto a la danza moderna
George Balanchine comenzó su carrera como bailarín, pero una lesión cuando trabajaba junto a Diaghilev, le obligó a centrarse en la coreografía frente a la interpretación. Se le considera el fundador del ballet neoclásico, aquel que utiliza los pasos de baile clásicos, pero no necesariamente se rige por los criterios más estrictos del ballet.
Quizás por dicha lesión, Balanchine destacaba en sus entrevistas como dificultad añadida para todos los bailarines la de trabajar con su propio cuerpo: “Los bailarines son instrumentos, como un piano que tocase el coreógrafo”. Y por si esto fuera poco, ¡hay que hacerlo con elegancia!
Martha Graham, la leyenda de la danza
Con Martha Graham comienza el desarrollo en Estados Unidos de la danza contemporánea. Sus clases de danza preparaban a profesionales capaces de las mayores proezas técnicas, pero que nunca debían olvidar que bailar es soñar. Era una de sus máximas: «La danza es el lenguaje oculto del alma».
Baryshnikov, trabajo, trabajo y trabajo
Mijail Baryshnikov no ha parado de bailar para vivir. Primero en Rusia, luego en Estados Unidos, y a sus 70 años sigue trabajando. En numerosas ocasiones ha hecho hincapié en uno de los aspectos más importantes de la danza: la ambición por superarse. Suya es una de las frases de danza más determinantes: «Los bailarines no nacen, se hacen».
Nietzsche, y el espíritu libre del artista
Pero no sólo los bailarines tienen derecho a filosofar sobre el baile. El filósofo alemán Frederic Nietzsche utilizó ampliamente la danza como metáfora de sus teorías. En Así habló Zaratustra, reivindica al superhombre, ese capaz de abandonar las ideas y reglas impuestas por los demás, y guiarse por su propia voluntad… Y la manera más fácil de llegar a ser un espíritu libre es ¡bailando!
Por último os dejamos con una cita del cantante, bailarín, actor y coreógrafo Fred Astaire. Y os invitamos a… simplemente ¡bailar!
Fotografías: Kryziz Bonny, Olivier-Houeix, Conrad-Dy-Liacco